Ayer por la tarde, mis hijas y yo nos tomamos la tarde libre. Es lo que tiene trabajar desde casa, que puedes organizar tu horario como mejor te convenga 🙂

Mi hija pequeña está un poco pachucha con una pequeña infección de orina y mi hija mayor, ayer estaba flojita y con algo de dolor de oidos después de haber terminado sus exámenes hace unos días y además de haber hecho el baile de fin de curso el lunes por la tarde. Así que sin pensarlo mucho decidimos no ir al cole por la tarde, descansar y ¡hacer manualidades!

Esta vez hemos hecho una botellita de sal de colores y creo que nos ha quedado ¡genial!

¿Qué necesitas para hacerla?

Muy poquitas cosas:

– una botella de cristal vacía (que nosotras hemos comprado en los chinos por 0,65 euros),

– sal fina

– tizas de colores (normales y corrientes)

¿Y cómo se hace?

Es super sencillo. Sólo tienes que colorear la sal con el polvo de la tiza. Colocar la sal ya coloreada en un papel doblado y echarla en la botellita (con cuidado para que no se caiga). Conforme se van teniendo puñados de sal de diferentes colores se van echando en la botella hasta llenarla del todo.

La sal se puede poner haciendo montañitas (como hemos hecho nosotras) o bien en recto. A mi particularmente me gusta más hacer montañitas porque me parece que queda más gracioso.

Una vez la botella esta completamente llena (y este punto es importante porque si no se llena del todo, los colores podrían mezclarse) se tapa y ¡ya está!

Mi hija está tan orgullosa de su botella que cuando la terminó le escribió un poema y la colocó encima de la tele (lugar de máxima importancia en una casa como todos sabemos jeje).

¿Y vosotros tenéis alguna manualidad fácil pra compartir?