Ayer, mi sobrina de 8 meses se dió su primer baño en el mar y lo disfrutó ¡a lo grande! Mis hijas ya llevan en la playa desde que empezó el mes de julio y es que, en mi opinión, no hay un lugar mejor que la playa para pasar las vacaciones con niños.

Libertad

A los niños les encanta sentirse libres y la playa es un lugar muy propicio para ello:

– Pueden correr, gritar, saltar, jugar a la pelota y muchas otras cosas que dentro de casa están limitadas

– Pueden bañarse y jugar con agua, que a todos los niños les encanta

– Pueden mancharse y no pasa nada

– Los pequeños pueden incluso ir desnudos sin pañal, una sensación muy agradable para ellos

¿A qué jugamos?

Además, la playa fomenta muchísimo la imaginación  y la creatividad de los niños porque tiene muchas opciones para jugar aunque no lleven juguetes de playa:

– Hacer castillos, murallas o todas las variantes de construir cosas con la arena

– Buscar conchas

– Enterrarse en la arena

– Jugar a que nos pillan las olas

– Jugar a las palas o a la pelota

– Pasear por la orilla del mar

– Hacer croquetas de niños (ya os podéis imaginar cómo jeje)

¿Y los bebés también?

Siempre que se tenga la precaución de evitar las horas de más insolación (entre las 12 y las 17 horas), se use protección solar potente y una sombrilla, se puede ir a la playa con bebés y desde luego vale la pena porque lo van a disfrutar muchísimo.

Los bebés aprenden en la playa, se estimulan y se divierten:

– Pueden tocar diferentes texturas a las que no están acostumbrados. La arena seca no es igual que la mojada, por ejemplo

– Pueden jugar con agua con una piscinita pequeña debajo de una sombrilla o directamente bañarse en el mar

– Pueden entretenerse viendo cómo juegan los niños más mayores

– Pueden andar descalzos y aprender a andar sin miedo a hacerse daño

Diversión saludable

Y además de la diversión, los niños pueden obtener muchos beneficios para su salud si veranea en la playa:

– La combinación de salitre con el agua salada es ideal para fortalecer los huesos, estar más fuerte y desinflamar los músculos

– El agua y la baja presión les hace comer y dormir mejor

– El sol y el agua del mar ayudan a mejorar algunos problemas de la piel

– Muchos pediatras relacionan las vacaciones en la playa con menos infecciones y catarros durante el invierno siguiente

Sólo algunas precauciones

– Poner protección solar a los niños de factor 30 en adelante y si es resistente al agua mejor

– Dar agua a menudo a los pequeños para evitar los golpes de calor. También se puede ofrecer fruta que además de aportar agua, está llena de vitaminas

– No estar demasiado tiempo al sol. Mejor debajo de una sombrilla

– Vigilar siempre a los niños en el agua. En el mar no hay que confiarse

– Respetar las banderas a la hora de bañarse. En España la bandera verde significa que te puedes bañar, la bandera amarilla significa que debes tener mucha precaución para bañarte y la bandera roja significa que está prohibido el baño

¿Y a vosotros os gusta la playa para veranear con niños?