Hace unas semanas publiqué un post que hablaba de la Lactancia Materna prologanda y de la cantidad de cosas que deberíamos conocer todos sobre ella, pero especialmente, los profesionales que nos relacionamos con madres: médicos, enfermeras, farmacéuticos, psicólogos, educadores infantiles, pedagogos, etc.
Algunas personas echaron en falta que en el post hablara más de aspectos psicológicos y así me lo hicieron saber (y yo se lo agradezco). Otras personas, consideraban que yo no podía afirmar de ninguna manera que los niños amamantados durante más tiempo no tuvieran problemas emocionales o psicológicos porque yo no soy psicóloga y que lo mejor que podía hacer era callar.
Así que les he hecho caso a todos y me voy a callar para dar paso a Ruth Giménez, mi socia y compañera en la creación del Programa de Formación de Asesoras de Lactancia Edulacta, porque ella es IBCLC y además psicóloga, por lo que creo que su opinión es fundamental en este caso.
Así se presenta ella misma:
Soy Ruth Giménez Martín, madre de tres hijos que han venido a iluminar mi vida. Además soy psicóloga, consultora certificada en lactancia materna (IBCLC), educadora de masaje infantil (IAIM_AEMI), y doula.
A raíz de mi maternidad encontré el sentido a mi carrera, la psicología perinatal, y descubrí mis pasiones, la lactancia y todo lo relacionado con el acompañamiento en la maternidad.
La máxima en mi trabajo es el empoderamiento de las mujeres para que descubran su manera genuina de vivir su maternidad, el apoyo e intervención clínica en las dificultades en la lactancia y el fomento y restablecimiento de un vínculo seguro entre el bebé y sus progenitores como prevención en la salud física, mental y emocional de ambos.
Empiezo ahora con un nuevo emprendimiento para trabajar on line en ruthgimenez.com, y así poder ayudar a las familias que se encuentran en proceso de maternidad, en el que ofrezco consultas individuales, talleres, cursos y charlas sobre diversos aspectos y formación en lactancia materna.
Y ahora os dejo con la entrevista:
1. Además de IBCLC eres psicóloga, por tanto tu opinión como experta es muy interesante en este tema ¿Crees que los niños que toman lactancia prolongada pueden tener algún problema de autonomía o de apego?
Es más bien al contrario, y si lo piensas tiene mucho sentido. Las personas tenemos que pasar por una etapa de alta dependencia en la infancia más temprana para devenir en niños más autónomos y adultos independientes, con seguridad y confianza. Esa etapa es la que formará los cimientos, fuertes y bien estructurados donde se sustentará el individuo adulto, y esa base que aporta toda esta seguridad la proporciona normalmente la madre o la figura principal de apego.
Como sabes la lactancia materna no es sólo alimento, eso es una visión muy reduccionista de todo lo que implica la lactancia, es también nutrición emocional. Es una forma que tiene la naturaleza también de asegurarse de que el bebé estará durante un largo período pegado a la madre porque es importante que lo esté.
Por eso la OMS tiene un documento donde explica cuáles son las pautas para dar el biberón, de forma que lo único que se pierda el bebé sea la leche materna, pero pueda seguir disfrutando de la cercanía con la madre, porque esto es algo que se sabe.
De hecho, los primeros meses o incluso el primer año, sí que la parte nutricional de la lactancia es fundamental porque la leche es la base de su alimentación, más allá del año la leche no pierde propiedades en absoluto, en cambio sí que adquiere más importancia la parte afectiva de la lactancia. El niño empieza a explorar, a caminar, a distanciarse físicamente de la madre por sí solo… y esto les genera ansiedad, por eso dan pasitos y vuelven corriendo a la base de seguridad, y aquí el pecho les aporta mucho consuelo, tranquilidad.
Además la necesidad de succión de los niños dura hasta los 2 o 3 años, por eso no nos resulta extraño ver a un niño de dos o tres años bebiendo de un biberón y con chupete… Qué mejor que succionar el pecho de la madre y además recibir el alimento que está hecho para ellos!!!
2. ¿Por qué piensas que está tan extendido el mito (incluso entre tus propios colegas) de que los niños mayorcitos que toman pecho van a ser menos independientes y pueden tener problemas emocionales?
Esta obsesión por que los niños sean independientes…
Cuando empiezas a involucrarte en el mundo de la lactancia lo primero de lo que te das cuenta es de todas las ideas equivocadas que tenías y que circulan por todas partes, además muy extendidas y arraigadas, incluso entre los profesionales de la salud, que hacen afirmaciones y recomendaciones a las madres sin basarse en ninguna evidencia, realmente se basan en los mismos mitos que cualquiera.
Uno de los grandes mitos que rondan a la lactancia es ese, la lactancia en niños mayores es todavía un tabú. La lactancia en bebés ya está más superada, hoy en día pocas mamás se esconden cuando dan el pecho a sus bebés, la mayoría empieza dando el pecho, aunque las lactancias conforme van creciendo los niños se van quedando por el camino desde muy pronto.
Y de las pocas que llegan a dar el pecho más de un año es muy probable que se escondan para hacerlo por no aguantar comentarios o miradas recriminadoras. Y como he dicho antes no sólo les recriminan las personas de a pié, también tienen que aguantar reproches por parte de profesionales.
Y esto es francamente curioso puesto que no hay nada que apoye estas creencias, al contrario, todas las evidencias defienden lo contrario.
Hay un artículo de la Dra. Isolina Riaño Galán que ya tiene un tiempo aunque es muy completo y aporta muchos estudios y bibliografía al respecto.
En cuanto al aspecto emocional al que aluden algunos detractores de la lactancia duradera:
Fergueson (1987), investigó desórdenes de conducta y concluyó que estos declinan con la duración incrementada de la lactancia. Los chicos que tuvieron una lactancia más duradera demostraron un ajuste social más fuerte y consistente.
Las lactancias duraderas están relacionadas con menores escalas de ansiedad en estudios con jóvenes adultos (Hawkins, 1975) (Bushnell,1977).
Los Doctores Newton y Ratner, demuestran que las carencias que se satisfacen al debido tiempo, cuando el niño las necesita, hacen que sea más seguro, independiente y emocionalmente estable en su futuro.
Según Hazebrouck, hay una fuerte presión de la sociedad por “fabricar” niños independientes antes que estén maduros para ello, provocando como consecuencia chicos pseudo independientes con una personalidad insegura y una gran sed de apoyo en lo externo. Un destete precoz los empuja a dar un salto al vacío, abandonando un apoyo seguro sin haber tanteado el siguiente. (Hazebrouck)
Mary Ainsworth nos dice que los niños más apegados y dependientes de sus madres los dos primeros años de vida, tienen menos ansiedad al entrar al colegio y mayor dominio de sí mismos a los 5 años.
En realidad “es el destete temprano forzado el que puede estorbar el desarrollo emocional e incrementar las necesidades de dependencia. “(Waletzky 1979)
En cambio, cuando escuchamos a alguien que hace referencia a los problemas o perjuicios que pueda acarrear la lactancia en niños a partir de cierta edad, si le preguntamos en qué se basa para afirmar esto, no podrá decir nada, porque no hay ninguna evidencia científica que lo demuestre o avale.
[Tweet “No hay ninguna evidencia científica que avale los problemas de la lactancia prolongada”]
3. ¿Hay algún estudio que apoye este mito o creencia?
Como ya he comentado, NINGUNO.
De hecho la OMS (Organización Mundial de la Salud), recomienda la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y junto con otros alimentos hasta los dos años o más.
Hasta los dos años significa que como mínimo sea hasta los dos años, y el o más significa hasta que el bebé y la mamá quieran puesto que no hay nada que demuestre que haya una edad concreta en la que pueda ser perjudicial.
4. ¿Hay alguna edad en la que se debería dejar de dar el pecho por el bien de nuestro hijo?
No, ya he comentado algo en la pregunta anterior.
Además cuando se estudia la duración natural de la lactancia materna, desde diferentes disciplinas se ha visto que la media mundial está en cuatro años, con lo cual no debe ser algo tan raro, y hay un excelente análisis (entre otros) de la antropóloga K.A. Detwiller que compara la duración de la lactancia en otros primates y establece relaciones con el peso al nacer, el peso de la madre, la erupción de los dientes, tiempo necesario para multiplicar el peso y otros factores, y llega a la conclusión de que la edad del destete en el ser humano está entre los dos años y medio y los siete años, y así hay varias teorías.
No puede haber estudios científicos que demuestren perjuicios de la lactancia natural espontánea, porque hay muy pocos niños que hayan podido disfrutarla.
No hay poblaciones significativas ni ha habido interés alguno entre la ciencia hasta ahora por ello.
De todos modos, no perdemos nada con probar. La humanidad de brevísima lactancia que tenemos hasta ahora deja mucho que desear 🙂
Hay pocos estudios que hayan mirado a la lactancia no interrumpida o prolongada, pero los pocos que hay, evidencian todo lo contrario de lo que piensan los mitos. Es decir, que los niños que han podido disfrutarla tienen más autonomía, se relacionan mejor con el entorno y son más independientes que el resto 😉
Y si, estoy de acuerdo contigo en que aunque sólo sea para probar a ver qué pasa vale la pena porque ya sabes el dicho “si quieres resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo” .
Un abrazo y gracias por comentar!
Gracias, Pilar. Esos estudios de los años 70 y 80 que citáis, ¿sabéis por casualidad qué grupos de niños estudiaron y hasta qué edad fueron amamantados? Porque coinciden exactamente con las décadas “negras” de la lactancia por así decirlo, con índices muy bajos.
Para mí hoy en día es de cajón y no necesito evidencia científica, la verdad. Es de cajón que solo desde un vínculo fuerte y sano en la infancia se puede alcanzar una verdadera independencia y madurez. Y que la sociedad está llena de “falsos independientes” adictos a montones de cosas, que van desde el trabajo hasta las compras, el alcohol o las drogas. Es más, la sociedad de consumo es por definición una sociedad adictiva, de permanentes insatisfechos.
Ah, y gracias por el artículo de la dra. Riaño, que no conocía! Lo enlazo a la bibliografía de mi blog! 🙂
Yo le doy teta a mi nene de dos años y 8 meses. Hasta los 6 meses exclusiva y luego con otros alimentos.
El es un nene feliz, seguro de si mismo. Muy independiente.
Al contrario de todas las cosas que me dijeron “va a ser demasiado pegado a vos” “nunca vas a poder salir sin el”, le demostró a todos lo contrario! Va al jardin 4 horas por la mañana, llega muy feliz y juega con sus compañeros. Además es muy atento, aprende muy rapido (ya sabe contar hasta 20 y conoce todo el alfabeto). La misma maestra del jardin me hizo notar que resalta en muchos aspectos de sus compañeros de la misma edad.
Así que pongan un palote del lado de “SI A LA LACTANCIA PROLONGADA”. Saludos a todos.
No creo que de ningún problema. Como madre reciente, también tenía ciertos prejuicios antes del embarazo. Cuando te informas cambia mucho la percepción. No me imaginaba que a un año de vida de la beba seguiría dando el pecho sin pensar en el momento de terminar la lactancia.
Dato: ayer mismo me llamó una amiga que tiene un bebé de una semana. Ningún médico le ha sabido ayudar con la lactancia desde el parto en el hospital, ni pediatra, matrón, ginecóloga… y ella me decía “durante las clases de preparación bien te insisten que es lo mejor, y ahora no saben ayudarme y me dicen que le de biberón y me olvide del pecho”
Yo alucinaba, una pena.
Hola Lydia,
lo que le pasa a tu amiga es el pan de cada día para muchas madres recientes (y para muchas asesoras como yo desgraciadamente).
Hay mucha presión por el pecho pero nada de información. Y a la primera duda o al primer contratiempo, se recomienda biberón y listo.
Es una pena!!! y eso nos demuestra que tenemos muuucho trabajo por hacer!
un besazo y gracias por comentar!
Totalmente de acuerdo. Aprovecho para consultaros: Yo soy madre de una niña de 2 años y 9 meses y un peque de casi 7 meses. La lactancia con la mayor fue feliz hasta que el peque cumplió 15 días en que me dio bruscamente la agitación del amamantamiento. Con el pequeño sigo normal, pero a la mayor la tuve que destetar de noche y ahora le tengo muy restringido el pecho porque me sigue pasando muchas veces y sobre todo si es a la vez a los dos. Ella me lo pide mucho y me da pena quitárselo del todo. Con ella lo de no ofrecer no negar no funciona porque siempre me pide al ir a dormir y al despertar. Creéis que negárselo a veces puede ser perjudicial, peor que no darle nada quiero decir? Algún consejo?
Mi hijo tiene treinta meses y también estoy negociando no darle fuera de casa por ejemplo, y aunque espero la respuesta de las expertas creo que es mejor mantenerle algo que negarsela totalmente, pues ya son mayorcitos y pueden entenderlo pero negarsela completamente por tu sola voluntad me parece muy duro emocionalmente.
hola, no soy ninguna experta pero negarle el pecho en la calle puede hacer q piense q tetear este mal visto. y aunq en parte eso es una realidad, yo creo q para cuatro madres q somos las q mantenemos la lactancia materna más allá de los 2 años, deberiamos dejarnos ver mas. yo a la mia le note cambio cuando me qede embaeazada. no qeria tetear fuera de casa todo eran comentarios negativos, q si eres muy mayor, q ahor la teta para tu hermano….. hasta q fuimos a la matrona y le convencio q eso era lo mejor!!!! para mi hija fue un alivio q un adulto y encima con bata blanca, q eso impone mas, le dijera q la teta era lo mejor q q suerte tenia q la iba a compartir con su hermanito…. En fin, yo sigo la lactancia en tandem trez años la mayor y tres meses el pekeño. Es lo mejor.
Anoche escribí desde el móvil así que no podía alargarme mucho, pero es que precisamente ayer por la tarde mi hijo y yo sufrimos una experiencia muy desagradable, que os cuento. Después de todo el día separados le doy pecho nada más encontrarnos en casa de mi madre, y luego para ir a nuestra casa tenemos que coger el metro. Pues bien, ayer venía lleno y mi hijo empezó a gritar: “teta, teta, ama, teta…” En el sitio habilitado para carritos había una madre con un carrito y dos hijos de más de ocho años, que no fue capaz de decirles dejarle que se siente… y es que sin sitio para poder sentarme, cargada con bolsas, tuve que dejarle en la silla aunque me agarraba de la camiseta y se cogió un berrinche como muy pocas veces le había visto. Cuando por fin se bajó esa madre y salieron me dijo “yo ahora no le daría desde luego”. Y como quedaban apenas dos paradas y enseguida alguien otra vez se puso allí tampoco le pude sacar de su silla. Salí del metro temblando, y cuando vi a mi marido me eché a llorar de los nervios y lo mal que me sentía como madre por haber tenido que negar a mi hijo la teta.
En ese momento pensaba que no vuelvo a coger un metro si no veo sitio para sentarme, luego me di cuenta de que podía haberme bajado antes y haberle calmado, o incluso haberle cogido y sentado en el suelo ante la impasividad de la gente (que encima tuve que oír “qué escándalo ha montado”). Esta misma mañana se lo contaba a una señora y me decía que nos estamos deshumanizando (pensar que nadie fue capaz de levantarse ante un niño de dos años…).
Y es que yo sé que ahora me toca educarle, pero no quiero que eso signifique quitarle ya de tetear, lo que ocurre es que ante situaciones como la de ayer prefiero ir mentalizando a mi hijo que en la calle mejor no, aunque reconozco que esta misma mañana me ha pedido y me he sentado en un banco (no en el tren) y le he dado antes de salir. Y mi marido me dice que para estar diciéndole ahora no y poniéndole límites es mejor que se la quite completamente, y eso no quiero porque creo que ahora mismo sería casi un trauma para él…
Hola Laura:
Leo tus comentarios a menudo en bebesymas y siempre me gustan.
Ya vi lo que te había contestado allí Armando y estoy de acuerdo, no te sientas culpable, la situación te desbordó y, como dice una de mis sobrinas de 6 añitos “la gente parece que no tienen corazón”. Comparto tu duda acerca de si les puede afectar que la gente les hable de ello como algo sucio, pero creo que mientras las personas importantes para ellos lo vean bien no tienen por qué sentirse mal, es una forma de aprender desde pequeñitos que “los de fuera son de palo”. Yo por ahora (27 meses) le doy donde me pida porque no me parece bien negarle el pecho, aunque cuando le he dicho que esperé un poco (sea en la calle hasta encontrar asiento o en casa si estoy cocinando por ejemplo) no me pone pegas, que es un santo varón, jeje, son pocas las veces tb y nunca le ha pillado cansado o disgustado…
En fin, lo dicho, que no te sientas mal por ese episodio en concreto y en cuanto a darle en la calle o no, haz aquello con lo que tú te sientas mejor, estar bien adaptado a una sociedad enferma es signo de enfermedad 😉
Besos
Muchas gracias por tus palabras Mara, es tan difícil encontrar en el día a día madres que dén el pecho a sus hijos mayorcitos… La verdad es que no tengo ningún problema en darle fuera de casa a mi hijo, y esta mañana lo he vuelto a hacer, pero le digo que le van a ver y van a tener envidia y es mejor un chupito corto y dejarlo para casita. Me ha hecho gracia que me hayas localizado tambié por bebesymas, jejeje… Y el tema del habla que comentas, me alegra mucho conocer el caso de tu sobrino, porque mi hijo ha arrancado a hablar con casi 28 meses, y es un poco angustioso, aunque veía que lo entendía todo y se explicaba perfectamente…
Si fuera perjudicial. El mismo cuerpo dejaría de producir en el momento adecuado. El cuerpo es sabio. Yo creo q la connotación que se le de y los comentarios alrededor de la lactancia continuada es la que puede ser perjudicial más que nada hacia la madre y el niño(a). Puede cohibir al niño hacerle creer que está haciendo algo malo y eso sí que es perjudicial.
Voy por mi segundo hijo, el cual tiene dos años y sigue tomando el pecho, no tengo intención de sacárselo muy a pesar del comentario de todos! Es un momento único para ambos, apoyo la lactancia prolongada y la crianza con apego. Nunca entendí porque a la gente le cuesta tanto el amor, el cariño y afecto, un niño lleno de amor es un niño seguguro para enfrentar el mundo!!! Gracias por divulgar está información y sostener esta filosofía de crianza!
Agostina, que bonito lo que dices: “Nunca entendí porque a la gente le cuesta tanto el amor”. Creo que ese y no otro es el mayor problema de la cultura actual. La lactancia está hecha del más puro amor.
quisiera que me ayuden con información, lei en algún momento respecto al tamaño de mandíbula que aun permitía un agarre efectivo y cómodo. Mi mayor acaba de cumplir 5 y a veces siento que el agarre esta cambiando y a veces me molesta. No creo que sea agitación en el sentido de rechazo, pero me preocupa que efectivamente sea algo físico que esta generando dificultades.
ya hace un tiempo lo he estado convenciendo que un día pronto ya no tendré mas leche, pero es algo que aun para el es lo máximo.
¡Hola!
Gracias por el artículo.
Me gustaría aprovechar para preguntar si hay alguna base científica en los comentarios que aluden al retraso en el habla en niños con LM de más de dos años.
Saludos,
Sandra
Hola Sandra,
Quería comentarte que no, no hay base científica a esos comentarios.
De hecho la LM ejercita los músculos necesarios para la fonación, por lo que afecta positivamente a nivel físico, y al colmarles emocionalmente aumenta su autoestima que evita bloqueos psicológicos que pudieran dificultar el habla, todo ventajas vamos 😉 Te recomiendo leer a Mariana Vas, logopeda, para más información (creo que ese es el nombre).
Por otro lado comentarte que mi hijo de dos años con LM tiene retraso del lenguaje… El mismo que tuvo el mayor de mis sobrinos, con biberón, que necesitó dos años de logopedia. Él ahora tiene 18 años, ha acabado el bachillerato con media de matrícula de honor y va a estudiar ingeniería robótica. Este dato te lo doy porque tb tienden a agobiarnos con los retrasos en el lenguaje diciendo que si son tontos, lentos, que nunca estudiarán, etc. Pues en absoluto.
Besos
Muchísimas gracias Mara!
La verdad, sí que me agobiaba un poquito el tema, sobretodo porque los dos comentarios que me llegaron fueron de personas cercanas, psicólogas las dos y una de ellas psicóloga infantil… pero ya sé que a veces se habla desde la impunidad de la bata blanca aunque no se tenga formación en el tema en concreto.
Gracias de nuevo,
Un abrazo.
Sandra
No creo que haya forma de vincular problemas en el desarrollo del lenguaje y lactancia prolongada, más bien al contrario. Son niños que tienen mejor ejercitados sus músculos faciales y su maxilar está mejor desarrollado. Si sirve como evidencia anecdótica, mi hija dice la R desde los 10 meses y desde los dos años habla perfectamente. Puede cantar canciones completas, contar números, decir colores, da las gracias.
Gracias Karla!
Hola yo soy mama d un niño de tres años y medio y seguimos con el pecho al hacerse mayor tuve presión para dejarlo (a los dos años) y d hecho lo intente pk cada vez k le daba el pecho me decían todavía? Mi propia familia… Lo intente y al día siguiente les dije esto es algo entre Nil y yo por lo tanto nosotros decidimos y desde entonces, hace ya año y medio seguimos, los dos encantados y sin escondernos, ahora estoy tan segura d k es lo mejor k ni me doy cuenta si alguien nos mira o comenta algo… Sencillamente no nos afecta, si alguien tiene algún problema es exactamente eso, su problema… No el nuestro, nos estamos encantados y así seguiremos hasta k nos apetezca.
qué es más independiente que el propio niño decida cuando dejar el pecho ?
eso si que es independecia
Hola,
Deberíais ser más rigurosos con las afirmaciones que hacéis, puesto que no se sustentan en los datos que citáis. Vuestro artículo afirma, que “las lactancias duraderas están relacionadas con menores escalas de ansiedad en estudios con jóvenes adultos (Hawkins, 1975) (Bushnell,1977)”.
Consultando el artículo original, se puede apreciar, en primer lugar, que la muestra es prácticamente anecdótica, ya que se encuestó a 26 mujeres estudiantes sobre las prácticas de lactancia de sus madres cuando ellas eran pequeñas. En segundo lugar, los datos muestran que no existen diferencias en ansiedad en función de la duración de la lactancia (3 meses, 6 meses y más de 6 meses de lactancia). Tan sólo hay diferencias significativas entre aquellos que nunca tomaron el pecho, y los que sí, independientemente de la duración de la lactancia.
Además, el artículo está mal citado, la cita correcta es:
Hughes, R. N., & Hawkins, A. B. (1975). EPI and IPAT anxiety scale performance in young women as related to breast feeding during infancy. Journal of clinical psychology, 31(4), 663-665.
Un saludo
Gracias por el artículo, es bueno que psicólogos normalicen la lactancia más allá de la etapa de bebé, ya que todavía son muy frecuentes ciertos mitos, como que el bebé se hace dependiente, que no se desarrolla correctamente o que crea un vínculo no sano con la madre. La verdad es que cualquiera que haya amamantado más allá de los dos años sabe que esos mitos carecen de fundamento.
También te agradezco que se use el término “duradera” en vez de prolongada, que es una palabra que chirría mucho.
He elegido esta entrada para mi recopilación semanal de posts de blogs de maternidad y crianza http://www.bebeagogo.com/2014/06/22/lecturas-dominicales-x/
Me encanta que derriben los mitos y sobre todo una sicologa! Una vez lleve a mi hijo (que sigue tomando pecho) de 2 años 2 meses, que en ese entonces tenia 11 meses y 20 dias, donde una pediatra que me dijo, no es normal dar pecho despues del año, al año se lo quitas. Es por estos comentarios que las madres dejan de dar pecho a sus hijos, porque confian en los medicos y profesionales. Por suerte tengo una gran madre que es matrona y pro lactancia materna, a mi hermano le dio hasta los 4 años y es un hombre de 22 años muy maduro, independiente y claro con sus sentimientos.
Un abrazo y sigan publicando articulos y entrevistas tan interesantes.
Cecilia
¿La media mundial está en 4 años? ¿Actualmente? ¿En qué periodo histórico de la humanidad? Alguien me podría pasar la fuente de ese dato. Lo que yo he leído no va en esa dirección precisamente y me interesa bastante el tema.
Tengo dos hijos varones uno de 4 años 1/2, que amamanto hasta los 2 años y 7 meses ,momento en el que quede embarazada de su hermanito que actualmente amamanto el cual tiene 1 año- 3 meses y espero poder darle pecho por más tiempo , si estoy segura que optando por la lactancia materna ellos no se han enfermado de nada , no han tenido diarreas, ni muchas fiebres en sus vidas ,el mayor es alérgico a la humedad y posiblemente sin la teta su alergia podría haber sido peor, la gente me miraba raro jamás me intereso lo que digan respecto a esto, de hecho hice siempre lo que sentí desde el corazon con respecto a la crianza de ambos.
Soy enfermera, mi trabajo está relacionado con los neonatos enfermos, considero que ante la falta de evidencia para el retiro de la lactancia materna, lo mejor es dejar claro que los primeros seis meses la leche materna es necesaria, después de los seis meses es complementaria, a los dos años sin duda es un lujo; sin olvidar que por medio de los sucedáneos se cubren parte de los requerimientos nutricionales, sin embargo los afectivos, de desarrollo, emocionales, conductuales se satisfacen únicamente con la lactancia materna.
Nos ha encantado la visión de este artículo, y de la doctora Ruth Giménez. Nosotros también entendemos la lactancia como algo más que alimentar al bebé, estamos muy de acuerdo con esa definición de “nutrición emocional”. Dar el pecho a tu bebé es un aspecto fundamental de la crianza con apego, y creemos que sus beneficios emocionales son imprescindibles para nuestros pequeños. Ojalá se siga profundizando sobre este tema, y muchas más madres se animen a seguir esta lactancia duradera
La lactancia más allá del año tiene enormes beneficios aun poco explorados, además de otras aplicaciones, estoy elaborando un estudio en mi tesis de maestría sobre ese tema y he encontrado información fascinantte. Gracias por publicar.