Recuerdo mi primer puerperio como si fuera ayer mismo. Mi familia vivía en otra ciudad igual que la mayoría de mis amigos, fui la primera de mis nuevos amigos en quedarme embarazada y además acababa de mudarme a una nueva casa mucho más grande, en una urbanización con parques y muchos niños, osea todo genial…pero yo no conocía a nadie.
Recuerdo mis paseos sola por el parque por las mañanas y recuerdo ir al parque por las tardes a leer un rato, a tumbarme en la hierba con mi hija o simplemente a tomar un poco el sol de invierno.
Siempre sola.
Esta experiencia no la he tenido solamente yo, porque con el tiempo cada vez he ido conociendo a más madres en situaciones similares. Madres que están solas y que se sienten solas en su crianza. Madres sin una red de apoyo en la que apoyarse cuando el cansancio o los nervios les vencen.
Madres que no tienen a nadie para relativizar los problemas de primeriza que nos han agobiado a todas: el cordón no se cae, es normal que tenga estas manchitas, hace ruiditos al dormir, es normal que quiera estar tanto en brazos, etc.
Madres que deben empujar el carro de la crianza sin apoyo.
Si las mujeres necesitamos de otras mujeres para estar bien emocionalmente, las madres puérperas más todavía.
[Tweet “Si las mujeres necesitamos de otras mujeres para estar bien, las madres puérperas más todavía.”]
Hace un par de años leí una noticia donde se comentaba que se había hecho un estudio entre mujeres cuyos resultados eran muy interesantes. se concluyó que las mujeres que hablaban frecuentemente con sus amigas, necesitaban mucha menos terapia psicológica y lo cierto es que tiene mucha lógica. Cuando una mujer está en un grupo de mujeres (como por ejemplo en un grupo de apoyo a la lactancia materna), se siente comprendida, se siente querida y nota el apoyo de las demás. Esto la hace sentir muy bien, muy empoderada, tranquila y con mucha más paciencia para enfrentarse a las noches sin dormir y a las hormonas locas.
Lo olvidemos que el puerperio es un momento delicado para cualquier mujer. Los cambios físicos y hormonales no ayudan, el cansancio y la responsabilidad de convertirse en madre puede abrumar a cualquiera, por lo que es importante tener apoyo…y si no se tiene ¡hay que buscarlo!
¿Qué se puede hacer?
Reconocer nuestro problema y tomar acción
A veces nos sentimos tristes y no sabemos por qué. Otras veces culpamos a nuestra pareja que hace todo lo que puede.
Lo mejor para todos es reconocer nuestro problema: estamos muy solas y no queremos estar así. Y lo siguiente es tomar acción para resolver esta situación.
Aunque no lo parezca esta fase es más complicada de lo que parece porque el cansancio puede hacer que nos quedemos en el victimismo y no hagamos nada por cambiar la situación que no nos gusta.
Buscar de forma activa una tribu
Tenemos que tener ojos y orejas bien abiertos para buscar nuestros apoyos: madres del parque, de la piscina, del cole (si el niño está escolarizado), vecinas, conocidas de otras…y no cerrar ninguna puerta. Nunca sabemos dónde vamos a encontrar una amiga en la que apoyarnos.
Acudir al grupo de apoyo a la lactancia o crianza más cercano a nuestra casa y una vez allí proponer quedadas en el parque o invitarlas a merendar a casa…
Apuntarnos a un grupo de juegos, muchas ludotecas los organizan y es un buen sitio donde encontrar otras madres. Acudir a cursos de masaje de bebés, a yoga con niños o a cualquier otra actividad que se pueda hacer con nuestros bebés.
Buscar una tribu virtual donde sentirnos siempre apoyadas y comprendidas. Ahora con internet ya no nos quedan excusas para no hacer esto.
Superar el miedo al rechazo
¡Tenemos que atrevernos a proponer cosas! Muchas veces pensamos que nos van a decir que no o que los demás no quieren acercarse a nosotras y lo que no nos damos cuenta es que seguramente están tan solos como nosotras.
Es muy probable que las otras madres se sientan igual de necesitadas de tribu que tú. Alguien tiene que dar el primer paso e iniciar un acercamiento, así que ¿por qué no hacerlo tú?
Mi necesidad de tribu me hizo más valiente y al cabo de unos meses no desaproveché la oportunidad cuando conocí a unas vecinas con hijos de edad similar a la de mi hija. Con el tiempo los niños se convirtieron en íntimos amigos y las madres formamos nuestra tribu que tanto necesitábamos todas.
Por otra parte, también decidí buscar mi tribu virtual y quise ayudar a muchas otras madres que se sienten solas y que no deberían sentirse así. Por ese motivo escribo este blog y por ese motivo abrí mi Comunidad Maternidad Continuum, donde todas nos sentimos escuchadas y nos apoyamos en la distancia: porque no es obligatorio estar en la misma ciudad para formar una tribu.
¿Y tú te animas a buscar tu tribu?
Foto gracias a www.freedigitalphotos.net
Qué razón tienes Pilar! Me reconozco en tus palabras… Yo también vivo en una ciudad lejos de mi familia, y como soy algo joven para ser madre, no tengo amigas que tengan hijos.
Me he pasado este año y medio muuuuy sola.
Quizás por eso me ha aliviado tanto escribir el blog, es una puerta de aire fresco!!
Besos!
Hola!
Es cierto…el blog sirve de desahogo muchas veces y además también te ayuda a ir creando una red virtual de apoyo porque siempre hay muchas mamás blogueras dispuestas a leerte y darte su cariño.
Es muy duro sentirse tan sola en un momento tan frágil como el puerperio…mucho.
Un abrazo enorme guapa! y muchas gracias por tomarte el tiempo de comentar!
Me siento muy identificada con este artículo, Pilar. Aunque hace ya casi 2 años que soy mamá, mi gran amiga está en Londres y aunque hablamos todos los días, no es lo mismo que tenerla aquí.
Al poco de ser mamá, me sentí sola, mis vecinas, que son mayores que yo, ya tienen hechos sus grupitos y hasta te miran con mala cara si te acercas con el niño, prefiero que mi hijo tenga los amigos fuera del edificio. Tampoco ayuda el estar todo el día en casa trabajando sola, pero poco a poco voy conociendo gente, como tú, y me voy sintiendo más arropada 😉
¡¡Feliz comienzo de semana!!
Hola María,
¡qué mala suerte que tengas esas vecinas tan desagradables!
Pero haces muy bien! no necesitas cerrar tu mundo sólo al edificio…si tu hijo va haciendo otros amigos en el barrio también está genial! ahí poco a poco puede ir surgiendo un nuevo grupo de madres en el que sentirte arropada.
Y mientras tanto…aquí estamos!! <3
Un besazo y muchas gracias por comentar!
Ayyy qué retratada me has hecho sentir jaja! Aquí en el quinto pino, más sola que la una, aterricé con un bebé de 3 meses y nadie con quien hablar. Las pasé canutas! 🙂
Madre mía!
es que lo tuyo son palabras mayores!! encima estabas en un país extranjero con otro idioma! eso si que es complicado para encontrar una tribu de apoyo!
Confío en que ese tema haya mejorado porque si no es como para volverse loca!
Un besazo hermosa y muchas gracias por tu comentario
Yo también me identifico con lo que has escrito. A veces me he sentido muy sola, paseando con el nene sin poder hablar con nadie porque los grupitos de madres ya están hechos. Mis amigas han estado ahí, pero sin hijos tienen otra vida muy diferente. Me costó aceptarlo pero ya me entristezco menos. Espero que cuando ellas tengan hijos sí puedan contar conmigo, no como me pasó a mí. Ahora comprendo a otras conocidas que fueron madres antes que yo y con las que perdí relación…
Hola Idoia,
¿sabes? tengo que escribir más sobre esto…cuando eres madre y tus amigas no lo son.
No se dan cuenta, ya lo sé, pero es muy duro ver que sólo te invitan a quedar para cenar y salir de copas o a tomar algo a las 8 de la noche entre semana…algo imposible de hacer para una reciente mamá.
No te pongas triste! ellas llevan otro ritmo de vida y lo entenderán cuando sean mamás. Mientras tanto no te quedes esperando y busca tu propia tribu!!
Un besazo y muchas gracias por el comentario (y por la idea de post! jaja)
Pilar
¡De nada! De hecho la semana pasada escribí sobre eso. ¡Ojalá encuentre mi tribu! Gracias 🙂
Por cierto, avísame con ese post, porfavor, para que lo lea. Es un temazo! 😉 gracias!!
Claro!!! te aviso seguro!
Y ahora mismo voy a leerte 😉
Un besazo
Hola Pilar,
Gracias por este bello post!
Mi bebé ya tiene 16 meses y justo ayer me sentí como describes esos momentos. Realmente sola y con un deseo profundo de llorar!!!
Al igual que tu, vivo en un país diferente y es mi primer bebé. aunque hay amigos ya con bebés aun siento que son mamás con intereses diferentes a los mios y por eso quiza no he podido sentirme contectada del todo.
Sin embargo, cuando me doy la oportunidad de salir fuera de la caja y darme animos yo misma, encuentro que hay otras mamás que están en igual de condiciones que la mía, y solo basta un empujoncito para animarnos a reunirnos y pasar una tarde agradable, entre juguetes, mocos y pañales.
Definitivamente se necesita de una tribu para educar a un bebé, pero sobre todo para apoyar a mamá a continuar con su extraordinaria labor!
Gracias de nuevo por esto tan lindo!
Hola Carolina,
es cierto! cuando te das la oportunidad de conocer otras personas te das cuenta de que no eres la única que está sola y necesita una tribu.
Un besazo y muchas gracias por tomarte el tiempo de comentar!
Es un tema muy interesante, porque no sólo durante el puerperio puede una sentirse sola y/o agobiada, sino en cualquier etapa después de ser madre, por eso es muy importante contar con hermanas, primas, madres, amigas que nos den su apoyo y su oído para contarles esos pequeños problemas que en conjunto hacen que el mundo se nos venga encima.
Gracias por el artículo
Hola Guadalupe,
¡tienes toda la razón!!
No sólo en el puerperio se necesita una tribu, se necesita siempre y durante toda la crianza.
Un besazo y muchas gracias por contestar!
Yo tb me he sentido sola, pero creo que es peor cuando tienes a tu pareja al lado y sin embargo te sientes asi…, no t comprende, necesitas más de él y no te da el apoyo suficiente, sientes que cargas con todo el peso de la crianza tu sola y que no se implica lo suficiente, y tú estas cada vez más agotada… física y psiológicamente…y nadie con quien hablar…
En mi caso no estaba lejos yo, sino mis mejores amigas las que estaban en otros paises buscándose la vida, y las que están aquí, pues bueno, como dijeron por aquí, no son madres, no pueden entender el alcance de tus sentimientos y tampoco quieres estar “dando el coñazo con tus problemas de nueva mamá”
Yo, además, he estado tan agotada que durante los primeros meses apenas salía a la calle, así que entras en un círculo vicioso.
Tengo que decir que para mi, internet esta siendo todo un salvavidas. Gracias a blogs como este encuentro personas que hablan de temas que me preocupan, que me agobian, y que a veces ni yo me entiendo, que a veces pienso incluso que no tengo razón, ni motivos, pero luego veo que esta tristeza que me embarga tiene un fundamento, y me siento identificada muchas veces.
Suelo pedirle a mi pareja que lea algunos articulos, esos con los que me identifico y de los que soy incapaz de hacerle ver como me siento, asi que asi estamos…
Pero vamos mejorando…
Hola Nayra,
es que en tu caso se ha juntado dos cosas, que te has sentido sola en la sociedad y además que te has sentido sola en casa (que es mucho peor).
A veces los papás también se sienten desbordados por la paternidad, pero no responden igual que nosotras, entonces se produce como una especie de desfase entre lo que tú necesitas y lo que él cree que necesitas….
Y sí, internet es una ventana al mundo, estoy completamente de acuerdo!
A mi me ha hecho encontrar gente maravillosa, así que adoro internet 😉
Un abrazo guapa y gracias por comentar!
Me siento muy identificada con Nayra.
Es terrible no tener apoyo en casa, se pasa realmente mal.
Yo gracias a las RRSS he salido adelante, he encontrado mi tribu virtual y he aprendido y aprendo muchísimo.
A veces pienso que no se como he conseguido, por ejemplo, mantener la lactancia (llevamos 18 meses) ya que nadie me ha apoyado e incluso en casa se me ha criticado por ello.
Por eso es básica la tribu.
Gracias por el post Pilar.
Un abrazo a todas.
hola pilar
nunca dejas de soprenderme con tus articulos tan tan interesantes y tan acertados , ya que todas nos sentimos indentificadas!!
Enhorabuena por este articulo y el resto,.. soy una mama trabajadora , ama de casa, esposa,.. y en estos momentos pasando una mala epoca matrimonial, .
Mi hijo tiene ya dos añitos y sigo sintiendo esa soledad y necesidad constante de contar o simplemente charlar con otras mamis de mis preocupaciones, alegrias o tristezas respecto a la crianza de mi hijo.
Vivo en un pueblo en el que he estado dos años y ahora vuelvo a irme a una ciudad ya que donde he vivido era provisional por el trabajo, con lo cual cuando conoces a gente o a alguna mami como es mi caso que tenga un nene de su edad y congenias bien con ella te tienes que marchar a otro sitio, …
Me siento sola muchas muchas veces ademas intento llevar a mi hijo a parques donde hay nenes pero mi horario laboral y donde vivo me hacen ir de parque en parque a otros pueblos para que mi peque vea a mas niños y no juegue solo.
Cuando vas a un parque las mamas estan charlando riendose con otras mamis y nunca te dan la facilidad de poder tener una conversacion contigo ya que ellas tienen su circulo cerrado entonces te desanimas un poco y dejas de intertarlo.
Por otro lado la crianza que intento tener con mi hijo muchas veces no es afin a las otroas mamais intento estar el maximo tiempo posible con mi hijo con lo cual muchas de esas mamis que dejan a sus hijos en la guarde los recogen mucho mas tarde, yo por mi aprte prefiero comer un bocata y dejar la casa aptas ariiba pero llegar a las 4 de la tarde y marchar con la mochila a respirar aire puro con mi peque cosa que dificulta esa falta de tribu.
Ahora mismo estoy estancanda porque en breve marchare a una ciudad y no se como empezar de nuevo ..
Buenos muchas grancais por escucharme que se que me he extendido mucho
un abrazo a todas las mamis y en especial a ti Pilar
Muchas gracias, Pilar, me he sentido muy identificada. Lo que no me esperaba es intentar entrar en tu comunidad y que me dijeras ¡que “la comunidad no acepta más miembros por el momento”!. Por favor, pon un aviso en el blog y no dejes que otras madres en mi situación se sientan nuevamente rechazadas. ha sido doblemente desagradable.