Hoy entrevisto a Raquel González, madre emprendedora y coach de transformación especializada en la transformación y evolución de las mujeres con sus propios caminos y talentos y creadora de la web Mujer en evolución.

El tema es muy interesante: el síndrome de la impostora. Porque yo creo que es algo que nos ha pasado a todas alguna vez y en estos momentos ella ha lanzado un reto gratuito para superar este síndrome que nos puede ayudar mucho (puedes anotarte aquí).

Y sin más dilación, vamos a ver qué nos tiene que explicar Raquel sobre el síndrome de la impostora.

1. ¿Qué es el síndrome de la impostora que tanto se escucha últimamente?

Técnicamente podría definirse como un conjunto de síntomas sociales que experimentan (o hemos experimentado) muchas mujeres en el desempeño de diversas tareas: miedos, tensiones, incertidumbres y desasosiegos ante la posibilidad de no saber, no estar a la altura o no cumplir con las expectativas que, creemos, tienen sobre nosotras.

La idea de impostora hace referencia a alguien que se hace pasar por quien no es, que finge ser algo, o suplanta la identidad de alguien.

Y esto se ve de forma muy clara cuando, por ejemplo, queremos emprender: no confiamos en nuestra idea, o que vaya a interesarle a alguien, nos comparamos con otros profesionales y nos sentimos demasiado “poco”, es decir, no somos suficiente como para poder hacerlo.

Esto también puede apreciarse a esa “continua” necesidad de seguir formándose antes de lanzarse, nunca consideramos que es el momento y que tenemos las herramientas y conocimientos que necesitamos para dar el paso.

Y también se puede ver en mujeres que ya son emprendedoras pero que a la hora de crecer, les cuesta tomar decisiones, no llegan a considerarse nunca expertas, no valoran sus logros, etc.

2. ¿Piensas que lo sufre todo el mundo, incluso las personas con éxito?

Sí, sí, lo curioso de este síndrome es que es al margen del éxito que tenga esa persona.

Porque nunca lo ven, no consideran que sean logros o que si han llegado ahí ha sido por suerte.

Y un ejemplo insigne es Michelle Obama.

3. ¿Por qué crees que nos afecta más a las mujeres?

Básicamente por nuestra educación y entorno sociocultural.

Porque hemos tenido muchas menos referentes de mujeres y porque parece que nos movemos en ámbitos que nunca han sido “nuestros” y ahora tenemos que demostrar que somos merecedoras de estar ahí.

Este síndrome también es resultado del miedo al fracaso que viene de cómo se nos ha penalizado el error y de los mensajes negativos que hayamos recibido cuando eso ha ocurrido.

Es decir, confluyen muchos factores y todos son culturales.

4. ¿Qué es lo primero que debe hacer una persona que quiera superar el síndrome?

Ser consciente de que lo tiene y trabajar las creencias en las que se sustenta, que aunque muchas son comunes, luego cada persona tiene sus propias experiencias y bagaje personal.

Y por supuesto, tener compromiso para querer cambiar la situación.

Para las que se sientan identificadas y quieran empezar a tomar acción para romper con este corsé que las ata, he creado el reto gratuito “Deja atrás el Síndrome de la Impostora”.

Empezaremos el lunes 4 de marzo y será a través de WhatsApp.

Durante 7 días trabajaremos en diferentes aspectos que afectan y les daré propuestas para ver dónde están y den sus primeros pasos.

Así que la que quiera apuntarse puede hacerlo todavía en este enlace: https://bit.ly/2SxxHZf antes de que se agoten las plazas.